Se acerca el otoño, y antes de que te des cuenta, los primeros copos de nieve están cayendo. La caravana se limpia, y cada grano de arena de las últimas vacaciones se barre meticulosamente. Lo que queda son hermosos recuerdos, tal vez una línea de bronceado y la anticipación de la próxima temporada.
Pero espera un minuto. Incluso en invierno, puedes ir a acampar. Por un lado, las hojas rojizas-naranjas, el rocío de la mañana y los bosques sumergidos en nieve tienen su encanto propio y dejan que la naturaleza brille. Por otro lado, los campamentos que están abarrotados en verano ahora ofrecen espacio más que suficiente. Te mostramos las posibilidades de acampar en invierno, lo que hace que acampar en invierno sea único, y a lo que debes prestar atención.